lunes, 2 de julio de 2007

DE MADRID HASTA LA MEDULA

Me encanta Madrid, debo jactarme de que soy la tercera generación de "gatos" (para quien no lo sepa así nos llaman a los de Madrid) y vivo en pleno centrito, soy la que el otro día salió en el un periodico gratuito diciendo que Madrid es una ciudad de vida nocturna y que debía tener metro las 24 horas, y si yo fuera la alcaldesa de la ciudad otro gallo nos cantaría en la Plaza de Santa Ana...viva las terrazas si, estoy de acuerdo, pero respetando al peaton leñe. Bueno que aquí os dejo un par de fotillos chulas de esta ciudad tan estupenda


AMPELMAN EN BERLIN CORRE QUE TE CORRE

esta es una gran foto hecha con una gran cámara en un gran sitio...y es que Berlín fue una experiencia para todos los sentidos, un lugar al que volver, una ciudad que hay que exprimir al máximo pero en varias veces. Y como ya conocemos mi sentido infantil de la percepcion de las cosas me enamoré del Ampelman, ese hombre con ¿barra de pan? en la mano que anima a todos los berlineses a cruzar a su debido tiempo, algo que ya se ha empezado a copiar también en nuestro país...todo un derroche de arte lumínico

Los recuerdos de la antigua Alemania democrática son un objeto de culto hoy en Berlín. Uno de los mayores exponentes de lo que fue la parte este de la ciudad durante la guerra fría es AMPELMAN el muñequito que indica cuando cruzar la calle en cada esquina.

A pesar de la caída del muro, este dibujo -que connota la opresión del régimen- se mantuvo inalterable a través de los años y se transformó en un ícono pop . Hoy se lo puede encontrar, además de en cada semáforo, en todo tipo de productos en las casas de souvenirs.